Posición del colectivo isleño frente a la crisis haitiana

La situación que actualmente vive la nación haitiana se remonta a los distintos períodos de saqueo, explotación, colonización, intervenciones militares yanquis, dictaduras criminales y gobiernos corruptos a que ha sido sometida.

El dominio de los distintos países y gobiernos imperialistas sobre Haití, la intervención militar de la MINUSTAH, la presencia permanente de la OEA, ONU, de funestas personalidades como Bill Clinton y de organizaciones oportunistas que viven del drama haitiano, aceleran la inestabilidad institucional en la tierra de Toussaint Louverture; Jean Jacques Dessalines.

La ausencia de instituciones sólidas, el carácter entreguista de la burguesía haitiana y la ausencia de direcciones obreras, campesinas, juveniles, populares de izquierda revolucionaria constituyen parte de esta realidad.

Todos estos factores se interrelacionan para que Haití viva en una crisis política recurrente de la que se aprovechan los sectores de poder para justificar la necesidad de que tropas militares extranjeras y aparatos políticos imperialistas anden por territorio haitiano como si fuera de su propiedad y desarrollar la ideología de que “Haití es un Estado fallido” y que como nación es ingobernable. De esta manera justifican el control de su territorio e instituciones políticas y sociales.

Por el contrario, el CI considera que Haití no podrá lograr la más mínima estabilidad política sin que las tropas militares de la MINUSTAH se retiren y la OEA, ONU, Banco Mundial, FMI y demás aparatos saquen sus manos del territorio haitiano.

Mientras los países y gobiernos imperialistas sean quienes financien, controlen y supervisen los distintos procesos electorales para instalar en los distintos poderes de

Estado a figurines títeres que se colocan incondicionalmente a su servicio el pueblo haitiano seguirá de mal en peor. El Colectivo Isleño considera que lo primero que deben lograr los trabajadores, sectores populares y progresistas en Haití es “construir una nación haitiana socialmente justa, económicamente libre y políticamente independiente” como reza el preámbulo de su Constitución. Esta es una condición imprescindible para que Haití se aboque a un proceso de institucionalidad y progreso. Por eso, nos colocamos al lado de los sectores que se oponen a cualquier tipo de salida salomónica a la crisis actual, como sería un “gobierno provisional”.

Nos oponemos a la continuidad de Martelly en el gobierno, a la presencia de la MINUSTAH en Haití, a la intervención de la OEA, la ONU, Bill Clinton y los distintos gobiernos de Estados Unidos y la Unión Europea. Decimos que los representantes del CELAC poco o nada tienen que buscar en Haití y mucho menos las autoridades de la República Dominicana encabezadas por su presidente Danilo Medina. No acordamos con la celebración de “elecciones” mientras Haití sea un país militarizado por tropas foráneas y las naciones y gobiernos imperialistas financien el proceso electoral como instrumento de control político y social.

En consecuencia, solamente depositamos nuestra confianza en los trabajadores, campesinos, sectores populares, la juventud estudiantil, grupos y personalidades progresistas de Haití, para que sean los que tomen en sus manos la capacidad de movilización demostrada por las masas haitianas y dirijan el actual proceso de lucha por el camino de la independencia y soberanía nacionales y construyan su propio régimen político y gobierno. Los llamamos a no dejarse engañar con “cantos de sirenas”. Esos sectores deben ponerse de acuerdo para que todo se haga sólo por el bien del pueblo haitiano.

Como Colectivo Isleño hacemos un llamado a las organizaciones y personalidades que desde República Dominicana manifiestan su solidaridad para con el pueblo haitiano, a las que levantan la bandera de lucha en defensa de los trabajadores Cañeros, los dominicanos de ascendencia haitiana, los inmigrantes haitianos, los condenados al apatridia, a exigir del gobierno dominicano que “saque sus manos de Haití”, parar las deportaciones contra inmigrantes en territorio dominicano y la represión militar en los distintos puntos fronterizos.

Por el Colectivo Isleño: Regine Charles, Yesibon Reynoso, Euclides Cordero Nuel, Rafael capellán, Luís Adames, Hugo Cedeno, Heidy Duran

03 de febrero del 2016 Santo Domingo, República Dominicana