El PRM: tanque de oxígeno para el PRSC

Sociólogo con más de 25 años al análisis de la institucionalidad municipal y a la investigación socio-política. Experto en temas de desarrollo local y reforma de la Administración Pública. Se desempeña como consultor para organismos nacionales e internacionales. Ha escrito varios libros enfocados en la descentralización del Estado y la participación democrática. Es uno de los sociólogos dominicanos más dedicado a la cuestión municipal.

En mayo 2016, el PRSC estará en la posición tres de las boletas electoral para elegir los cargos a tres niveles de la Administración Pública: presidente, congresistas y municipales. El PRSC también recibirá de la JCE más de 400 millones de pesos para su financiamiento. Estas dos condiciones, según muchos perremeistas, convinieron en los incentivos para el acuerdo entre el PRM y el PRSC.

El justificar una alianza electoral en función de una posición en los primeros lugares de la boleta electoral es un punto de partida falso y desvela debilidad en la oferta del PRM. El posicionamiento electoral no se consigue predominantemente a partir del lugar que se ocupa en una boleta electoral; se consigue con estrategias de incidencias políticas, con un buen marketing político, educación a los electores, con ofertas creíbles, en los debates con los líderes de opinión pública, con ataques a los puntos débiles de los adversarios y potenciando los puntos fuertes del candidato. Esa justificación también revela y antepone un juicio, erróneo, en el cual se precalifica a la población votante como ignorante, o que quizás no sepa votar. No obstante, no existen hechos electorales que pongan de manifiesto dicha ventaja. La justificación se queda en la esfera de lo hipotético.

Por su lado, el dinero del PRSC es de ellos y de nadie más. Lo gastarán en todo aquello que le genere beneficio de modo particular. La historia del reformismo es la historia de la cultura trujillista-balaguerista caracterizada por el patrimonialismo, la rentabilidad política corporativa, la personificación del poder y el clientelismo; antivalores, estos, de la cultura política que están. entronizados, instalados e incorporados como prácticas en el sistema de partido que ha gobernado República Dominicana.

El PRM le ha puesto un tanque de oxígeno al PRSC,para que monte su vagón al tren que conduce Luís Abinader, sobreviva al reconocimiento electoral y continúe gobernando ámbitos públicos con cuotas de poder que no se corresponden con su peso político y electoral en la sociedad dominicana. En el PRSC, la desesperación, el pánico, el desvelo, la angustia y el miedo a perderlo todo le llevó a refugiarse en una alianza cuyos productos y resultados, facilitado por el PRM, le sacaría de la sala de cuidado intensivo en que podrían quedar después de las elecciones del 2016. La participación en solitario del PRSC era su principal debilidad, la cual se convertiría en amenaza para perder los beneficios de las cuotas de poder. El PRM convertido en intensivista oxigenó a un paciente en estado terminal.

Por su parte, el PLD hizo una exclusión intencional, para no pactar, con los remanentes del PRSC-Quique Antúm. El PLD lo desechó porque no sumaba lo necesario, como en periodos anteriores, y »mendigaban» mucho. El PRM ha recogido ese remanente y ha dado espacios para candidaturas con un número más grande que lo que merecía el limosnero. En el PLD, en crisis por su reparto interno entre leonelistas y danilistas, ya no cabía o había posibilidad de adicionar candidatos con mucho peso en los escenarios electorales de gran tamaño demográfico. El acuerdo con el PRM pudo significar un alivio para el PLD. En este contexto Danilo Medina dijo: «No siempre dos es igual a uno más uno”.

Parece ser que el PRM olvidó, cuando firmó el pacto con los balagueristas, que la debacle electoral del PRSC se inició en el año 1996, no en el 2000 como muchos opinan. El liderazgo del PLD configuró una estrategia de sustracción visible de las simpatías del PRSC que devino en su hundimiento, y en el conservadurismo peledeista. En este caso, son evidentes el desempeño electoral en el año 2000, con el 25% de votos cuando ese partido participó en solitario con Balaguer, y siendo Amable Aristy Castro su candidato a la presidencia en el año 2008, en el cual obtuvieron 4.59% del total nacional de votantes. Ambos torneos reflejan un hundimiento del PRSC. Según la última encuesta Gallup, realizada en el año 2015, el PRSC obtendría el 2.1% de votos (distribuido entre Quique Antúm y Amable Aristy Castro). La misma firma encuestadora capturó el 3.2% de simpatía para Alianza País, el partido de Guillermo Moreno.

El PRM optó y pactó por una posición en la boleta y por el dinero del PRSC. Perdió la oportunidad de construir una alianza opositora con sectores liberales y de centro izquierda. Pero, el PRM parece ser que no vio las cosas como son, sino como ellos son: el mismo PRD.

Muchos que equivocaron el camino, culparon al camino (José Narosky).