El Futuro de las Ciudades y sus Grandes Desafíos

El Futuro de las Ciudades y sus Grandes Desafíos

DECLARACIÓN DE DONOSTIA / SAN SEBASTIÁN

La Asamblea General de Ciudades del Centro Iberoamericano de Desarrollo Estratégico Urbano, CIDEU, se ha reunido los días 16, 17 Y 18 de marzo del año 2016 en la Ciudad de  Donostia / San Sebastián, para intercambiar experiencias, conocimiento y pensar en “El Futuro de las Ciudades y sus Grandes Desafíos”,

DECLARA

Que vivimos tiempos de cambios vertiginosos en la evolución de la humanidad, que presentan a las ciudades desafíos muy relevantes a los que debemos hacer frente en los próximos años.

Que las ciudades son agentes esenciales en la lucha contra el cambio climático y el respeto por el medio ambiente, puesto que es en ellas donde reside, en buena medida, la capacidad de actuar sobre factores que aceleran dicho cambio climático, como el consumo de energía y otros recursos o las emisiones de gases con efecto invernadero. Por ello, las ciudades deben convocar a sus ciudadanías, movilizarlas e implicarlas en un proceso de innovación social y cambio cultural, como base para construir un modelo de ciudad que mitigue el cambio climático, y conduzca a un tipo de actividad con la menor huella ecológica posible.

Que la globalización, la digitalización y las organizaciones en red, van a suponer fuertes transformaciones en el sistema productivo, que van a impactar sobre el empleo, la organización del tiempo y del espacio público, el urbanismo, y los servicios que se van a prestar a la ciudadanía. Reivindicamos el papel de liderazgo de las ciudades en la transformación del tejido económico y el impulso de nuevos yacimientos de empleo y actividades económicas de futuro.

Que el nuevo modelo urbano de las ciudades debe ser innovador, creativo y lo suficientemente atractivo como para atraer o retener talento y actividad empresarial. Ha de ser capaz de generar empleo, suficiente en cantidad y calidad pero, también, teniendo en cuenta su propia singularidad y sus capacidades endógenas; al mismo tiempo, hemos de planificar el desarrollo económico de nuestras ciudades mirando al futuro y pensando globalmente cuando actuamos localmente, y, al revés, pensamos en lo local actuando globalmente.

Que para que exista la necesaria cohesión social, las ciudades deben desarrollar proyectos que fomenten la equidad, la igualdad de derechos de la mujer, un espacio donde los jóvenes construyan el futuro de forma activa, y los mayores vivan su plenitud con calidad de vida, y donde quienes residen en la ciudad, procuren a quienes llegan, la misma o mejor acogida que los residentes de una u otra generación recibieron cuando llegaron.

Que estos desafíos no pueden abordarse sin participación, para la que es menester, una nueva gobernanza. Es en las ciudades donde debe crecer la regeneración democrática, que haga imposible la corrupción, e impulse el sentimiento de pertenencia y corresponsabilidad de la ciudadanía, con la cosa pública, la gestión de la ciudad, la creación de redes y asociaciones vecinales, y la creación de capital social

Que estamos viviendo una profunda transformación en la forma en la que se piensan las ciudades. La planificación estratégica territorial permitió la incorporación de la colaboración público-pública y público-privada en el desarrollo del modelo futuro de ciudad, consensuando, impulsando, a través del propio proceso, el empoderamiento de la ciudadanía y de los agentes más relevantes. Hoy estos procesos han adoptado formas diferentes, pues la digitalización y las redes sociales han abierto un abanico de posibilidades que permite incorporar como actores a sectores amplios y representativos de la ciudadanía.

Por todo lo cual, esta Asamblea General de Ciudades,

ACUERDA

1.- Poner en marcha planes de comunicación que permitan concienciar a la ciudadanía sobre la necesidad de adoptar cambios en su forma de utilizar la ciudad. Trabajando activamente para

  • Crear condiciones e impulsar el uso de medios de transporte público y privados no contaminantes.
  • Promover la eficiencia y rehabilitación energética de viviendas e infraestructuras.
  • Disminuir la huella ecológica actuando sobre la alimentación y su transporte, y potenciando la agricultura de proximidad.
  • Gestionar de manera más decidida los residuos urbanos, para reducir, reutilizar y reciclar.
  • Potenciar el uso de energías y materiales renovables.
  • Reducir el consumo energético de edificios, y espacios públicos utilizando la tecnología más eficiente.

2.- Promover el papel activo de nuestras ciudades, implementando estrategias que conduzcan al desarrollo económico glocal. Entre otras estrategias nos proponemos:

  • Promover el ejercicio del oficio de emprender, especialmente entre los jóvenes
  • Promover el aprendizaje y práctica de la innovación en general, y de la innovación social en particular.
  • Descubrir y explotar nuevos yacimientos de empleo que pongan en valor todos los recursos locales y conviertan las amenazas en oportunidades.
  • Transformar los espacios urbanos obsoletos, infrautilizados u ociosos, para promover actividades productivas con sentido de futuro.
  • Procurar la externacionalización de las empresas locales, y posicionar una marca paraguas de ciudad con garantías de calidad
  • Captar talento, y promover el encaje local y desarrollo del talento existente.
  • Considerar al conocimiento como factor clave para añadir valor y promover su gestión como herramienta de aprendizaje
  • Promover el apoyo al desarrollo personalizado del capital humano, para que toda la ciudadanía tenga buenas oportunidades de empleo, y como la mejor forma de combatir la desigualdad y la inseguridad que se nutre de las situaciones de pobreza, sea esta grave o relativa.
  • Fomentar la cooperación entre las ciudades para impulsar proyectos conjuntos o en colaboración.

3.- Reivindicar que la ciudad es acogedora, por que acogió en su día a los que la habitan ahora, y va a seguir acogiendo a los que vivirán mañana en ella. El uso de la ciudad, de sus servicios y espacios públicos, requiere una actuación decidida que resuelva los graves problemas sociales generados por tanta modalidad de informalidad como padecen nuestras ciudades. Todas las personas tienen derecho a la ciudad, y de forma dialéctica, adquieren deberes y compromisos que debemos potenciar haciendo ciudades educadas y educadoras. Nos proponemos impulsar:

  • El urbanismo pedagógico y participativo que ha venido dando buenos resultados en las ciudades iberoamericanas
  • La formación profesional y otras formas como las escuelas taller y otro tipo de acciones a dirigidas a fomentar el empleo de los jóvenes.
  • Impulsar unos servicios sociales que palien las situaciones de exclusión, fomenten la educación y la lucha contra el abandono escolar, y procuren la integración de los colectivos de desplazados e inmigrantes que buscan apoyo en la ciudad.
  • Promover la igualdad entre hombres y mujeres en todos los ámbitos donde en cada ciudad se produce esa desigualdad.
  • Construir ciudades y entornos urbanos amigables con las personas mayores impulsando el envejecimiento activo y la relación intergeneracional.

4.- Impulsar el desarrollo de una nueva gobernanza a nivel local, y crear el necesario capital social, exige convertir al diálogo activo en el eje central de la actividad política.

Proponemos gobernar con la ciudadanía, no para la ciudadanía. Interpretar lo que viene y ser capaz de participar activamente en la construcción de lo que queremos que sea el futuro, va a requerir:

  • Cambios culturales que todos tendremos que asumir, con procesos pedagógicos  que van a modificar el funcionamiento de la ciudad. Para que la ciudadanía pueda caminar, no solo hace falta un espacio público cómodo y seguro, también es necesaria una fuerte revolución cultural que plantee y valore la necesidad y bondad de hacerlo.
  • Impulsar el dialogo y el trabajo en red de forma colaborativa, para favorecer el  intercambio de experiencias nuevas que ayuden a la mejor distribución de los excedentes que el sistema produce y que reparte de manera tan insoportablemente injusta.
  • Convenir una nueva manera de pensar la ciudad utilizando las herramientas de georreferenciación y comunicación en red que nos proporciona la tecnología digital para mejorar la participación, y la valoración de los impactos producidos por los proyectos estratégicos implementados.

Esta Asamblea estimula a CIDEU a fortalecerse como red de ciudades que se piensan, en un entorno donde cabe tanta sinergia como el iberoamericano, y en tiempos de cambio donde disponer de una buena estrategia es más necesario que nunca. Del mismo modo entendemos, que la formación y especialización de las personas que se dedican a ejercer como profesionales de la estrategia, debe ser objetivo prioritario de la red.

Donostia / San Sebastián a 18 de marzo de 2016