Algunos afirman que desde lejos las cosas se ven mejor. Por ejemplo, desde el exilio cubano, la voz de la inmortal Celia Cruz, montada en el fidelísimo sonido de la Sonora Matancera, desvela la realidad de un Caribe que lo baila todo y, a veces, la misma cadencia del cuerpo mulato, parece mutarse en las acciones de los gobiernos. Del extenso repertorio de éxitos sacamos uno que acierta y forma parte del título de este trabajo.
Apagamos la radio, sintonizamos la realidad. Para eso colocamos sobre la mesa un ejemplar de la más reciente Encuesta de Presupuesto Abierto, un estudio que realiza el International Budget Partnership (IBP), que en el país tiene como socio a la Fundación Solidaridad.
Es la séptima edición de la OBS, como son sus siglas en inglés, de un estudio que se realiza en 117 países y que para el caso dominicano puntualiza aciertos y retos. Empleando 145 indicadores, los especialistas independientes que en cada país son encargados de evaluar los presupuestos y las acciones administrativas deben evaluar documentos publicados, eventos, actividades y avances. Con exactitud marcial vigilar el paso hacia adelante y señalar el que se da hacia atrás.
En conjunto con la encuesta un experto independiente anónimo y un representante del gobierno, en este caso del Ministerio de Hacienda, revisan el borrador del cuestionario.
Concentrado en tres pilares, veamos cómo va la danza de la realidad, en cuanto a transparencia, vigilancia y participación pública del presupuesto nacional dominicano.
En el Índice de Transparencia la República Dominicana alcanza un 75 de 100, ligeramente más alta que respecto a la que obtuvo en 2017. Esto es así porque el país ha aumentado la disponibilidad de la información presupuestaria mediante la publicación del Documento Preliminar en línea. El Informe Preliminar tiene como propósito divulgar los parámetros amplios de las políticas fiscales con anterioridad al Proyecto de presupuesto del ejecutivo, describe el pronóstico económico del gobierno y los ingresos, gastos y deuda anticipados. En transparencia el promedio global fue de 45 sobre 100.
En Participación Pública en el proceso presupuestario el resultado dominicano es de 31 sobre 100, lo que significa que no proporciona suficientes oportunidades formales a la ciudadanía de participar de forma activa en las diferentes etapas del proceso presupuestario. En este renglón el promedio global es de 14.
En Vigilancia Presupuestaria la puntuación es de 57 sobre 100. La Encuesta de Presupuesto Abierto al inspeccionar la función del Congreso y de la Cámara de Cuentas, como órganos de fiscalización y control, encontró una vigilancia limitada durante el proceso presupuestario, dado que las acciones de la primera son limitadas, mientras que las acciones de la segunda institución, la Cámara de Cuentas, se consideran adecuadas. Una puntuación de 61 sobre 100 se considera una supervisión adecuada, en este caso el país quedó por debajo.
La Encuesta de Presupuesto Abierto es la única herramienta de investigación basada en hechos, comparativa e independiente, a nivel global, que utiliza criterios internacionalmente reconocidos para evaluar el acceso a la información presupuestaria del gobierno central por parte del público, las oportunidades formales que el público tiene de participar en el proceso presupuestario nacional, y el papel de las instituciones de vigilancia del presupuesto, como la legislatura y los auditores, en el proceso presupuestario.
El reto es que República Dominicana supere las debilidades que presenta en participación, fiscalización y supervisión del presupuesto nacional. El empoderamiento ciudadano, el fomento de una ciudadanía critica y propositiva, debe convocarnos como nación. Este es el momento y este es un reto como país.
Quizás no estemos lejos del día en que la fiesta nos encuentre con distinta coreografía, dejemos los pasos sistemáticos que, hacia adelante y hacia atrás, nos estancan.