No se trata de ser negativa o positiva, pero a la verdad, una se pregunta, puede haber gente que aún hable de “festejar” el Día Internacional de la Mujer? Es posible que todavía haya quien no entienda que este día es para “conmemorar” y no precisamente, con juegos florales? Qué es un día de recuerdos dolorosos que evoca nuestras luchas centenarias por reclamar nuestra humanidad?
Hoy, hablemos de la gravedad de la desigualdad, la inequidad y la exclusión de las mujeres, que impiden un ejercicio real de su ciudadanía que, según datos del PNUD, reduce en un 44 % el desarrollo del país.
Hablemos de que, la inserción mayoritaria de las mujeres dominicanas es en áreas laborales caracterizadas por altos niveles de inseguridad e inadecuadas condiciones laborales lo que genera a su vez, altos niveles de desprotección que se traducen en la ausencia de garantías de un buen seguro de salud, seguro social y pensión digna.
También de que existen escasas oportunidades de empleo para las mujeres en sectores en auge de la economía como el sector tecnologías de la información y la comunicación (TIC), donde las mujeres ocupan sólo el 33% de los empleos frente a un 67% de ocupación masculina.
En que, como recordara una querida compañera, en República Dominicana 2,074 mujeres han sido asesinadas de 2005 a 2015, mucho más que las muertes por dengue, malaria u otras enfermedades y apenas un poco menos que todas las muertes por accidentes de tránsito. Un país, en el que, de cada 5 mujeres mayores de 15 años, una ha sido víctima de violencia física en algún momento de su vida.
Hablemos también, de que en nuestro país, tenemos la cuarta tasa de mortalidad materna más alta en las Américas, después de Haití, Guyana y Paraguay, 121 muertes maternas por 100,000 nacidos vivos, y que el 19% de esas muertes corresponde a mujeres en edad adolescente.
Que según el Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica de Mortalidad Materna el 70,8% de las muertes maternas son evitables, porque la alta tasa está relacionada a complicaciones en el embarazo y el parto, y en nuestro país, el 97,8% de los partos son atendidos en centros de salud y el 97,9% por personal profesional, sin grandes diferencias entre zona urbana (99.0%) y rural (97.0%).
No es que digamos siempre lo mismo, es que no nos oyen!
Hoy, hay que seguir conmemorando el dolor de las mujeres a causa de la injusticia de una democracia planteada en desigualdad. Qué se enteren los partidos políticos en promoción!