El ayuntamiento de Santiago continúa desorientado
Me asombran los empeños del alcalde de Santiago, en no someterse al marco legal municipal. Ahora lo vemos encaramando bomberos en el tope de un camión y amenazando a los ciudadanos con dispararle con un cañón de agua a presión, a todos aquellos que estén en la calle sin guardar la distancia de dos metros entre una persona y otra.